Enfermedades Parasitarias:

Fasciola hepatica (Linnaeus, 1758)

Fasciola hepatica (Linnaeus, 1758)

La trematodiasis, enfermedad parasitaria propia de ciertas aves que se caracteriza por la presencia de parásitos del grupo de los Tremátodos, con localización en el oviducto y bolsa de Fabricio. Los Trematodos hepáticos viven en los conductos biliares de su hospedador vertebrado. Su cuerpo es típicamente aplastado y de forma oval o lanceolada. Los huevos, operculados, salen junto con las heces del hospedador.

El nombre Trematoda hace referencia a la cavidad que forman las ventosas (del griego, trema: foramen). La parasitología es una rama de la ciencia ecológica que trata el estudio integral del fenómeno del parasitismo, así como las relaciones existentes entre el parásito y el hospedador.

La enfermedad es más frecuente en los meses cálidos del año pues es entonces cuando es posible el parasitismo intermediario en los caracoles.

Las señales más ostensibles de enfermedad en las aves, son la puesta de huevos irregulares carentes de cáscara y la descarga continua de un líquido lechoso por la cloaca que aglutina las plumas perí cloacales y abdominales.

En este caso sobreviene una peritonitis, caracterizada por la postura de “pingüino”, cianosis y muerte.

La asociación de un ser menos evolucionado, con otro más evolucionado, gracias a dicha asociación, el parásito vive a expensas del hospedador. De esta forma el parásito amplía su capacidad de supervivencia, y el hospedador sufre un perjuicio (este último dato es lo que le diferencia del comensalismo, en el que el hospedador no sufre perjuicio).

Los trematodos son gusanos monoicos, y tienen morfología aplanada o de hoja. El mecanismo de transmisión suele ser a través de la ingesta de pescado o crustáceos, verduras u otros alimentos. Son endémicas en países orientales. Los más frecuentes son Fasciola hepática (conocida vulgarmente como la duela del hígado de las ovejas) y las Schistosoma (comúnmente llamados bilharzia).

La trematodiasis es un grupo de enfermedades causadas por endoparásitos y ectoparásitos. Los trematodos de monogenea y aspidogastrea principalmente parasitan en pescados, anfibios, reptiles, moluscos y crustáceos. Y los trematodos digestivos de digenea también parasitan en mamíferos y aves, con formas que varían, y un ciclo de vida complejo, pero su estructura básica y desarrollo comparten similitudes.

Davainea proglottina (Davaine, 1860)

Ciclo biológico F. hepática

Requiere de dos hospedadores: los animales herbívoros (vacas, ovejas, cabras, aves, entre otros) u omnívoros entre ellos el hombre, como hospedadores definitivos, y los moluscos pulmonados de aguas continentales del género Lymnaea intervienen como hospedadores intermediarios.

El ciclo vital de un trematodo comprende los estadios de adulto, huevo, miracidio, esporoquiste, redia, cercaria y metacercaria. En algunas especies puede faltar alguna de las fases larvarias o existir varias generaciones de un estadio larvario determinado.

Los huevos se producen en gran cantidad y tienen morfología variable, aunque suelen ser ovales. Dependiendo de las especies, los huevos pueden salir al exterior embrionados o no. Salvo alguna excepción, los huevos deben caer al agua, donde con condiciones determinadas de oxígeno, temperatura y luminosidad surge el primer estadio larvario o miracidio.

El miracidio es una larva pequeña, ovoide, alargada y cubierta con láminas ciliadas aplanadas. En el extremo anterior se encuentra una papila apical protráctil en la cual desembocan dos tipos de glándulas: la glándula apical, situada en posición central, y las glándulas de penetración, situadas a ambos lados de la anterior; la secreción de estas glándulas colaboran en la disolución de los tejidos del hospedador durante el proceso de penetración del miracidio.

Cuando el miracidio encuentra a su primer hospedador (que suele ser un molusco: caracol de agua dulce), penetra en él, transformándose en esporoquiste; éste tiene tegumento sencillo y posee células germinales que darán lugar a la siguiente generación larvaria, las redias.

La redia posee un tubo digestivo sencillo y células germinales que darán lugar al siguiente estado larvario, la cercaria, que sale al exterior a través de la pared de la redia o por un orificio especifico. La cercaria posee una gran variabilidad morfológica, según los grupos; una vez en el agua nada en busca de un segundo hospedador intermediario o una planta, enquistándose como metacercaria.

La metacercaria debe ser ingerida por el hospedador definitivo; en el intestino, por acción de las enzimas queda libre de su cubierta y migra hasta su localización definitiva, donde se transforma en el adulto. En los Esquistosomátidos la cercaria busca al hospedador definitivo y penetra en él activamente

En condiciones adecuadas de temperatura (9° C – 26° C), las cercarias emergen del caracol y deben enquistarse para que puedan proseguir su desarrollo como adulto en un hospedador adecuado. Para ello, al contactar con una planta u otro objeto sumergido, pierden la cola y se enquistan (metacercarias). En este estadio pueden sobrevivir tiempos prologados (10 meses o más) si las condiciones ambientales le son favorables.

Algunos mamíferos pequeños, aves anfibios, peces o ciertas larvas de insectos se alimentan de caracoles de agua dulce. Cuando las condiciones son favorables, los depredadores y poblaciones de caracoles se multiplicarán rápidamente manteniendo un equilibrio, pero puede desplazarse significativamente como cuando se cría patos y gansos de manera exagerada en Alemania para el control de la F. hepatica (LEVINE, 1970)

El fármaco de elección en todas las tenias es el praziquantel, Tenicida de amplio espectro a base de Praziquantel al 10 % indicado para el control y el tratamiento de parasitosis intestinales de las aves domésticas causadas por cestodos En las trematodiasis intestinales, poco frecuentes, ocurre lo mismo.

Caracol de agua Lymnaea stagnalis

Ciclo vital Fasciola hepatica

Bibliográfica:

Ash, L. R. y Oriel, T. C. 1987. Parasites: A Guide to Laboratory Procedures and Identification. ASCP Press, Chicago.

MERCK & CO. (1995). Manual Merck de Veterinaria . Rahway, N. J., EEUU.

Pereira A, Pérez M. Trematodos intestinales. OFFARM. 2003

BUXADÉ, P. (1987). La gallina ponedora . Ed. Mundiprensa. Madrid.

DORN, P. (1987). Manual de patología aviar . Ed. Acribia. Zaragoza.

Yriberry Ureña S, Cervera Reyes Z. Parasitosis intestinal. ASMEG HOR. Revista de Enfermedades del Aparato Digestivo. 2002

HOFSTAD, M. S. (1984). Diseases of Poultry . Iowa State University Press, Ames, Iowa.

ZARZUELO, E. (1982). Vademécum de la patología infecciosa de las aves domésticas . Ed. Aedos, Barcelona.

Peters, W. y Gilles, H. M. 1989. A Colour Atlas of Tropical Medicine and Parasitology. Wolfe Medical Publications, London.

CASTELLÓ, F y CASTELLÓ, J. A. (1960). El nuevo arte de criar gallinas. Ed. Aedos, Barcelona.

OROZCO, F. (1989). Razas de gallinas españolas. Ed. Mundiprensa. Madrid.

LACADENA, J. R. (1998). Genética . Ed. AGESA

PUERTAS, M.J. (1992). Genética, fundamentos y perspectivas. Ed. Interamericana McGraw – Hill.

SANCHEZ-MONGE, E. (1969), Genética . Ed. Espasa – calpe S.A.

OROZCO,F y ROBLA, F. (1986). Aspectos genéticos del gallo de León. XXIV Simposio de la WPSA (Sección española): 199 – 212.

DE LA LOMA, J.L. (1973). Genética general y aplicada . Ed. UTEHA.

CASTELLÓ, J.A., LLEONART, R., CAMPO, J.L., OROZCO, F. (1989). Biología de la gallina. Real Escuela de Avicultura.

LLEONART, F. ROCA, E. CALLÍS, M. GURRI, A. PONTES, M. (1991). Higiene y patología aviares . Real escuela de avicultura.

STURKIE, P.D. (1968). Fisiología Aviar. Ed. Acribia. Zaragoza.

LOHMANN ANIMAL HEAFTH (2012)

Os pueden interesar estos otros apartados

Anatomía Gallina

Plantilla de Enjuiciamiento

Gallina Castellana negra

Quieres compartir, o comentar en tus redes sociales

Escanéame