El agua para nuestras gallinas

Siendo imprescindible en la avicultura el agua de bebida, es un elemento al que no se le da la importancia que merece en la cría de las aves. Como es lógico en cualquier explotación, los objetivos de rentabilidad, centran la atención del avicultor en el alimento. Las grandes subidas del precio del alimento es un hecho, mientras que la calidad del agua, tanto de las instalaciones hidráulicas, control, técnicas de administración y tratamiento del agua de bebida, quedan relegados a un segundo plano.

No hay vida sin agua. Este principio, conocido ya desde muy antiguo, se explica fácilmente si pensamos que de todas las sustancias que forman parte de cualquier organismo viviente y entre ellas, nuestras gallinas, el agua es el componente principal, que interviene en todos los procesos físicos y químicos necesarios para la continuidad de la vida.

La proporción de agua en el cuerpo de las gallinas es variable, disminuyendo al aumentar la edad y cambiando también en caso de tratarse de animales sometidos a una alimentación rica en hidrocarbonados (compuesto de agua y carbono, como los cereales, sus derivados, los tubérculos y las legumbres). Así, un pollito recién nacido tiene casi un 85 % de agua en su organismo, un pollo joven alrededor del 71 %, una gallina adulta el 56 % y un capón cebado sólo el 42 %.

Según Leeson, del total de agua de un ave el 70 % se halla en forma de líquido intracelular y el 30 % en forma extracelular. De esta última, unas tres cuartas partes se halla en los espacios intersticiales y el resto en el plasma sanguíneo, radicando perfectamente el balance hídrico en mantener un equilibrio dinámico entre estas dos partes.

Papel biológico del agua:

De forma resumida, el cometido o función que realiza el agua en el organismo de la gallina son las siguientes:
 
  1. Forma parte en un 75 % aproximadamente de la composición de la sangre.
  2. Es la sustancia básica de todos los fluidos intercelulares que intervienen en el transporte de los principios nutritivos.
  3. Forma parte, aunque en cantidades variables, de todas las células del cuerpo en las cuales tienen lugar las reacciones químicas del organismo.
  4. Debido a su elevado calor específico, es el más importante regulador de la temperatura corporal.
  5. Participa en todas las reacciones y cambios fisiológicos que controlan la presión osmótica, el pH y la presión oncótica (presión osmótica ejercida por las proteínas séricas y, en particular, por la albúmina se denomina presión oncótica) del organismo.
  6. Interviene en los procesos de la digestión como transportadora de las partículas alimenticias a través del tubo digestivo.
  7. Es esencial en el proceso de eliminación de los productos de desecho del organismo por vía renal.

Hay que recordar que los animales beben de 2 a 3 veces más de lo que comen, y si falta el aporte hídrico, o se administra en malas condiciones, tiene consecuencias negativas en la producción animal. Si tratáramos en profundidad el metabolismo del agua, deberíamos pensar en que su ingesta proviene de:

  • El agua de bebida, sin duda la mayor fuente de aprovisionamiento del 75 al 80 % del total.
  • La contenida en los alimentos, aún los actuales piensos compuestos, suministrados en forma de harina, suelen llevar alrededor del 10 % de humedad. Del 5 al 10 % del agua necesaria para el ave tiene este origen.
  • El agua metabólica, originada en el organismo como subproducto del catabolismos (parte del proceso metabólico que consiste en la degradación de nutrientes orgánicos, digestión u otros procesos químicos corporales). Cerca del 15 % necesaria para el ave proviene de ahí

La excreta de agua se realiza a través de:

  • Las excreciones sólidas y líquidas – heces y orina -. Sin embargo, sólo el 16 % de toda el agua excretada o poco más en pollitos pequeños tiene esta vía. 
  • Las pérdidas de evaporación, muy pequeñas en las aves a través de la piel, por no tener glándulas sudoríparas, pero elevadas a través de la respiración, especialmente cuanto mayor es la temperatura ambiente. Del 75 % al 80 % del agua se elimina por esta vía.
  • Los huevos, en el caso de las ponedoras, la pérdida no obstante es pequeña, pues sólo puede elevarse a un 5 % del total.

El agua, para beber como para la limpieza, es una de las principales materias primas, utilizadas en la industria avícola, y pese a su importancia, es muy poco lo que se ha estudiado respecto al papel que desempeña en la avicultura. El agua de calidad, y su uso, se manifiesta en la salud y en el rendimiento de nuestras gallinas.

Gallina bebiendo agua natural 

 

Por aludir a algunos ejemplos prácticos resumiendo:

  • El agua sirve como medio de conducción de nutrientes y desechos en el organismo.
  • Es el transporte de las hormonas y mensajeros químicos, trasladándolos de sus lugares de producción a los sitios necesarios, requeridos por el ave.
  • Actúa como lubrificante en las articulaciones.
  • Es componente esencial del equilibrio ácido-básico (reacción química que ocurre entre un ácido y una base, produciendo una sal y agua).
  • En el balance osmótico (es la presión que se ejerce por el movimiento de las moléculas del agua).
  • Funciona como emulsionante en el organismo, siendo pocas las sustancias que no son solubles en ella.
  • Actúa en reacciones químicas, formando dentro de los productos resultantes, una molécula de agua.
  • El agua tiene un elevado calor especifico y requiere para elevar su temperatura mayor energía en comparación con otros líquidos, eliminando mucha energía cuando se enfría.
  • Estas propiedades juegan un papel esencial en el control térmico de las gallinas.
  • También, el aumento de la temperatura del agua, disminuye su viscosidad y tensión superficial facilitando una serie de reacciones que permite el funcionamiento óptimo del sistema inmunológico.

En los diversos recorridos del agua natural, es modificada su composición al incorporarse elementos orgánicos e inorgánicos tanto de la superficie como del subsuelo. muchos de ellos son dañinos para la salud humana y en ocasiones, para algunos animales domésticos.

Las condiciones climáticas, geográficas, geológicas, estacionales y las prácticas de manejo de la misma, pueden afectar a la calidad del agua, que abastece a nuestro gallineros o granjas.

Importancia del agua para la gallina:

Para los pollitos recién nacido, el agua representa entre el 75 y 85 % de su peso corporal. Durante el proceso de crecimiento, en machos 61 % y disminuye al 55 % en hembras, mientras que en el huevo el 65 % constituye su peso en agua. El agua del cuerpo esta sujeta a un balance metabólico como cualquier otro nutriente, con ingresos y perdidas, alcanzando un equilibrio que al romperse, provoca un cuadro patológico.
 
En el ave joven este balance es positivo, dado que se requiere agua para la formación de tejidos y reacciones metabólicas durante su crecimiento. Por ello, los pollos deben tener una fuente constante de agua limpia y fresca que garantice su óptimo crecimiento y máxima eficiencia para la transformación alimenticia de la dieta.

Un ejemplo de la importancia del agua; una gallina sobrevive incluso si pierde el 98 % de su grasa o el 50 % de la proteína corporal, pero muere si pierde el 20 % de su agua corporal.

La perdida de agua en la gallina, se da a través de las heces, orina, por las secreciones nasales y la respiración, siendo esta última de gran importancia, ya que de ella depende el control de la temperatura corporal.

La eliminación del agua difiere en función del líquido ingerido, edad y hasta con fines comerciales, por ejemplo en los pollos de engorda producen heces con 60 y 70 % de agua, mientras que las gallinas de postura alcanzan 75 %.

Es conocido que entre las causas más comunes de pérdida excesiva de agua, están las enfermedades de las aves, como son las enteritis, las diarreas, coccidiosis, et., sobre todo en aves en crecimiento y con estrés calórico.

Temperatura:  Puede aumentar o camuflar sabores y olores. Hay una relación entre la temperatura del agua y el consumo de la misma para nuestras aves, ver foto.

Sabor y olor:  Aun no se conoce lo que sabe bien o mal de nuestra gallinas o aves comerciales y el olor cae dentro el mismo contexto ya que tienen poco desarrollado el olfato y el gusto. Por lógica debemos administrar sin sabor u olor, hasta no determinar lo contrario por el bien de nuestras gallinas.

Color: Tiene poco que ver con la aceptación por parte de la gallina, pero puede ser indicativa para nosotros de contaminación.

Turbidez: Se refiere a la presencia de sólidos en suspensión como partículas diminutas en el agua. La causa de la turbidez es importante, ya que si son materiales de desechos humanos, animales o industriales, el agua no es segura para beber y puede transmitir enfermedades o generar toxicidades agudas o crónicas, e incluso con impacto para el ser humano.

En las siguientes fotos se resumen;

  • La influencia de la temperatura, en el consumo de alimento y agua.
  • Relación entre temperatura del agua de bebida y consumo del ave. 
  • La altura sugerida de los bebederos en relación a la edad de las aves.

Influencia de la temperatura en el consumo alimento y agua

Altura sugerida de los bebederos en relación a la edad del ave

Consumo de agua en aves:

Gallinas bebiendo

El agua no cabe duda que es un componente esencial, aunque no suele incluirse en los requerimientos nutricionales, pero esta sujeto a que se establezcan niveles mínimos de consumo en nuestras gallinas. La demanda de agua en forma primaria, es por consumo voluntario del ave. La cantidad de agua ingerida siempre es mayor a la de cualquier otro nutriente y difiere su ingesta por diversos factores, entre los que se encuentran:

Temperatura ambiental: se ha estimado un incremento en el consumo de agua, en promedio, de 7 y 9 % por cada grado Celsius, en aumento de la temperatura ambiental a partir de los 21° C. Las gallinas de ponedoras pueden aumentar el consumo de agua de 150 a 300 ml cuando se incrementa la temperatura de 21 a 32° C.

En condiciones normales la gallina tiene un consumo aproximado de agua, dos veces a la cantidad de la dieta alimentaria ingerida, pero en ambientes cálidos la proporción puede aumentar a ocho veces o más. En cambio, el frío reduce el consumo de agua, aunque no se ha definido en que proporción.

En climas templados las necesidades de agua en las aves se atiende a las siguientes proporciones:

  • El 76 % se cubre con el agua de bebida.
  • Del 6 al 10 % del agua se consume con el alimento.
  • El 14 a 18 % corresponde a agua metabólica, producto del metabolismo oxidativo de los nutrientes como proteínas, grasas y carbohidratos.

Para la edad del ave se han desarrollado diferentes fórmulas para calcular el consumo de agua. A continuación un ejemplo:

Cantidad de agua por pollo al día = edad en días x 5.28 ml.

En esta fórmula, se ajusta este valor en los meses fríos, con el coeficiente de 5.1 ml/día y de 5.7 ml/día en meses cálidos.

Diversos autores han intentado establecer un consumo de media en milímetros, en las siguientes fotos se resumen:

  • Factores que afectan al consumo de agua en aves. 
  • Consumo de agua en aves, de diferentes edades, y en ambientes con distintas temperaturas. 

Lo mejor es, sin duda calcular el consumo de nuestras aves, bajo las condiciones de manejo de cada gallinero o granja. Esto podrá ser una alternativa de gran utilidad, para observar la salud de nuestras gallinas y el éxito de diversos tratamientos si son necesarios.

Factores que afectan el consumo de agua

Consumo de agua en aves, de diferentes edades

Estado de salud del agua:

Gallina bebiendo en un charco

Para aprovechar al máximo el agua es necesario tomar en cuenta algunos aspectos sobre el compartimento de la gallina respecto al consumo del agua. A diferencia de otras especies, las aves no succionan, obtienen el agua picoteando, y al echar la cabeza hacia atrás, dejan escurrir su agua por el esófago, siendo la cantidad que obtienen relativamente poca.

Se mantiene en el bebedero sobre dos minutos y regresa a el durante varias ocasiones al día. Las gallinas prefieren comer y beber cuando otras aves se encuentran en los comederos o bebederos (interacción social), y es raro que una gallina solitaria se acerque al bebedero.

Aún sin conocerse exactamente el por qué, se ha comprobado que gallinas hermanas, alimentadas y alojadas por igual y con idéntica puesta pueden consumir diferentes cantidades de agua. Según Sutherland y Deacon 1972, quienes midieron individualmente el consumo diario de agua en una manada, al mismo tiempo que lo relacionaban con la puesta de cada gallina, las diferencias entre dos aves poniendo la misma cantidad de huevos pueden llegar a presentar hasta un 70 % de aumento.

Sin embargo, comparando otras dos aves con el mismo nivel de puesta entre sí, la diferencia en el consumo entre ellas sólo fue del 7 %. Por otra parte, lo curioso es que de un día a otro una misma gallina variará de un 20 % a un 30 % su consumo sin ninguna razón aparente que lo justificara.

En ocasiones, un consumo de agua excesivamente bajo o alto en un día determinado quedaba compensado por el fenómeno inverso al día siguiente pero en otros casos el ave no efectuaba esta compensación hasta al cabo de varios días. No se conocen las razones de estas diferencias individuales pero el hecho es que existen y que no pueden ser olvidadas

Los procesos febriles y las diversas patologías clínicas y subclínicas, que pudieran presentarse en nuestras gallinas afectan al consumo de agua. Se ha demostrado que los pollos sometidos a estrés calórico lo resisten mejor, cuando aumentan su consumo de agua; por el contrario, al disminuirla en 20 %, se reduce la eficiencia alimenticia y hay retraso en el crecimiento.

La privación prolongada de agua en pollitos causa nefritis, nefrosis, (causado por diversos trastornos que dañan los riñones)  policitemia (trastorno sanguíneo en el que la médula ósea produce demasiados glóbulos rojos) y re sequedad en la piel de las patas.

En gallinas, la misma situación genera necrosis de los ovarios (Muerte de las células y los tejidos), Proventriculitis (inflamación del proventrículo o estómago glandular de las aves), disminución del tamaño de los huevos, así como del grosor y densidad del cascarón.

Consumo y tipo de alimento: es muy habitual y de manera cómoda calculamos el consumo de agua, con base en la relación agua-alimento y se ha observado que las aves ingieren el doble de agua que de alimento. 

En condiciones óptimas los pollos en iniciación consumen de 2 a 2.5 mililitros de agua por gramo de alimento y en aves de postura en crecimiento de 1.5 a 2.9 mililitros de agua por gramo de alimento. 

Sin embargo, este hecho debe ajustarse cuando hay cambios en la temperatura o bien de acuerdo con la edad del ave.

La medicación de las aves con agua, nosotros debemos tomar en cuenta los aspectos etológicos (comportamiento de los animales en sus medios naturales), considerando que consumen agua en un promedio máximo de dos minutos y después transcurre un periodo de descanso (varios minutos e incluso horas) para que vuelva a acercarse al bebedero.

Calidad del agua:

Ya hemos comentado que el agua es un recurso relativamente disponible en todo momento, a un precio económico, y que el factor para nuestro gallinero o explotación, es su calidad y no su disponibilidad.

Una vez que nosotros hemos invertido en aves de raza o genetica valiosas, tenemos que procurar proporcionarles un ambiente adecuado, con una dieta balanceada y el agua de calidad para que su desarrollo sea óptimo.

Se ha calculado que el agua de mala calidad, conlleva a unas pérdidas del 30 al 100 % en los costos de medicación, por la reducción de la disponibilidad del principio activo del medicamento, aparte a mayores los costos por problemas de salud y mortalidad,

Para evaluar la calidad del agua se toman en cuenta sus características físicas, químicas y microbicidas, no existe un nivel de calidad del agua admitido a escala mundial para la avicultura.

Es de suponer que difiere de la asignada al consumo humano e incluso de la utilizada para riego. Está claro que la salud de las aves puede verse afectada por ingerir agua de mala calidad, ya que ésta ligada a su origen (rio, pantano, manantial, artesiano, et) y determinada por el tipo de suelo, precipitación pluvial, escurrimientos de las áreas adyacentes y las actividades humanas de la zona donde tengamos nuestros gallineros o explotaciones.

No hay en la naturaleza agua absolutamente pura y en lo negativo puede contener hasta 90 posibles contaminantes no aceptables.

Los principales grupos contaminantes son:

  1. Compuestos inorgánicos (calcio, magnesio, hierro, manganeso, silicatos, dióxido de carbono, sulfuro de hidrógeno, fosfatos, cobre, aluminio, arsénico, plomo, cadmio, nitratos).
  2. Compuestos orgánicos.
  3. Sólido.
  4. Gases.
  5. Microorganismos (algas, protozoarios (Cryptosporidium sp, Giardia sp) bacterias por ej., Escherichia coli y otras coliformes).

En las fotos que encontraréis a continuación, se hace una recopilación de datos obtenidos por diferentes autores que describen algunas características físicas y químicas del agua, así como sus posibles repercusiones en la salud del ave.

Esto nos puede servir para comprender, en su caso un análisis del agua de nuestras instalaciones o zona y saber en que proporciones los componentes del agua son aceptable o no, para la salud de nuestras gallinas.

Efectos de los elementos químicos presentes en el agua, sobre la salud de las aves

Efectos de los elementos químicos presentes en el agua continuación

 

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LOHMANN ANIMAL HEAFTH (2012)

 

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